Para las empresas, vivir la pandemia ha representado el movimiento de estructura más grande por el cual han tenido que pasar, y esto ha llevado a fortalecer tanto a los equipos como a los líderes. Líderes que deben apegarse a las nuevas tendencias y necesidades, líderes que lidien con lo familiar, líderes que lidien con el entorno y líderes que lidien con el trabajo. En este sentido uno de los tipos de liderazgos que las organizaciones necesitan hoy día, es aquel que lidera desde el alma, llamado Soulful Leadership que traducido al español significa liderazgo conmovedor.
Para liderar con el alma, es preciso contar con una soulful mindset, esa mentalidad conmovedora que te lleva a actuar naturalmente con empatía, lo que se traduce en colocarte en el puesto de una persona y entender sus situaciones, dificultades, conectarte con ella y ayudarla a mejorar su situación. En el ámbito corporativo, cuando tus colabores sienten que tú entiendes sus problemas, hace que estos se sientan motivados, valorados y tomados en cuenta, generando engagement contigo y con la empresa.
Lograr ser un soulful leadership, requiere la aplicación de la inteligencia emocional a toda su expresión, los líderes deben ser capaces de manejar sus emociones inteligentemente y hacer que sus colabores también la usen; ya que, sin ella la ansiedad afectaría gravemente el rendimiento de los colaboradores. Un colaborador que no sepa responder ante situaciones inesperadas, será un colaborador poco productivo y desmotivado. Es por ello, que el líder debe entender y ser capaz de ayudar a su gente en tiempos difíciles.
Otra de las características con la que debe contar el soulful leadership, es la capacidad de resiliencia, vista como aquella facultad de adaptarse y recuperarse a las situaciones que se le presentan y de seguir visualizando el futuro. En ocasiones, las adversidades representan aquella oportunidad para desarrollar competencias que se tenían latentes y que el individuo no conocía. La resiliencia se puede lograr mediante la meditación, como la conexión con el tercer ojo de la persona, logrando la claridad e iluminación de los problemas y sus posibles soluciones. Además el líder debe ser comunicativo, contar con actitud optimista y por sobretodo generar calma y paz. Bajar la ansiedad del equipo hará que la resolución de los problemas sea visualizada fácilmente.
En este sentido, entendemos entonces que este tipo de liderazgo será practicado con Mindfulness, con esa atención plena requerida para actuar bajo un profundo estado de conciencia, que logre separar los pensamientos para poder reconocerlos y poner en duda los patrones mentales. Hacer esto permite prestar atención sin juzgar, medir las dimensiones y consecuencias de nuestras respuestas, aporta empatía, ayuda a visualizar las situaciones desde otro punto de vista y así llegar al corazón y a la mente de las personas de otra manera.
Un líder que entienda la importancia de estos 4 puntos y los implemente con su equipo de colabores, será un líder que capitalice la motivación, la empatía, el agrado, la felicidad y amor de sus colaboradores, además tendrá una organización más rentable y más sostenible.
Andy Tablante – IG: businessconandy